Mientras doblo ropa y tomo unos mates te pienso. Estás lejos, hablando por teléfono y planeando lo de esta tarde. Te reís, vas y venís por la casa, hablás sola y estás contenta. Salís a tu patio de mandarinas y seguro que te ponés a barrer y como hay sol sacás las mantas para que ventilen los días de verano que se fueron. Mientras tanto, pensás en platos ricos para nosotros. Días y días de manjares. Te conozco.
Y yo acá que odio formar pares de medias y me aburro buscando cuál va con cuál, te recuerdo en pequeños detalles. ¡Qué cosa ingrata esta tarea silenciosa de las madres, que nadie ve el tiempo que lleva! ¿Cuántas medias doblaste en tu vida, mamá? ¿Cómo no ví cuando hacías todo eso? Y cuando digo eso, amontono medias-cacerolas-pucheros-escobas-camas-pisos-mas camas-guisos-tortas de cumpleaños-fiebres-aspirinas y tecitos con miel-guardapolvos-camisetas-medias.
Siempre hay medias por ahí, entre las manos de las madres.
Como acá, ahora mientras armo pares y doblo.
Hoy quisiera escribirte un poema, pero no puedo, me salen abrazos desmedidos, palabras gastadas. ¡Cómo quisiera encontrar para vos mamá, una palabra no dicha! Y sin embargo hago estos pares de medias más prolijos que nunca, pensándote en los versos que me guardo, Versos que estirados y redonditos doblo colmados de recuerdos tuyos.
Blanco con blanco por ejemplo.
Y despliego los jazmines de tu patio, tus manteles de hilo bordados y las sábanas abiertas secándose al viento del oeste     dilato el aire largo con largo    talón con talón mientras te viajo en el pasillo florecido, y al negro con negro lo convierto en verde colombiano, no te gusta el verde inglés, es oscuro. No hace juego con tus ojos que brillan demasiado. Y otra vez estiro largo con largo y las medias son la carretera que anticipo. Sinuosa ruta 5 que no aprendí a querer jamás. Y eso que debería amarla, porque es el camino que me lleva derechito a vos. Pero la detesto y le temo, mucho mas que hacer pares de medias. Entonces como me enoja el miedo, doblo rápido par con par. Y otra vez blanco con blanco que tiño de maíz y extiendo los días que se hicieron un bollito en nuestros dedos y tu cocina rubia y ocre es del color con el que a mi me gusta recordar el campo. Cuando la soja no lo invadía todo y era un trigal dorado acá y mas allá había sorgo, girasoles, pasto. Ya ves mamá, doblo medias, algo tan prosaico y no puedo escribirte ni un poema, yo que escribo a diario.
Será por esa cosa del pudor de hija, que de tanto en tanto me da y que callo los versos que me guardo.

(no voy a estar por acá por unos días, hoy es el cumpleaños de mi vieja –¡¡cumple 80!!- y me voy con ella, a mimarla como se merece.
Me voy para mis pagos)


...y como soy un quemocursi, en Perras Negras, le dedico el programa del sábado :)

8 Comentarios

  1. Que tengas un buen viaje.
    Y que lo pases muy bien.

    Besos.

  2. Molinillo says:

    ... Mis lágrimas rodaron gordas y veloces por las mejillas.Salieron de repente, sin previo aviso...
    Muchas veces haciendo estas cosas como doblar una media y tantas otras me detuve en el tiempo y pensando en las manos de mi madre les dedico mi ser como si se me fuese la vida en ello... ...
    Visualicé a tu madre, a mi madre y sentí como otras veces que te leo que hablabas por mi... Ganas de verte con tu madre. Ganas de ver a la mia... En realidad, es lo que más se anhela ante algo tan entrañable como fueron estas palabras...

    GRACIAS por ésa tibieza... y esa esencia en cada post...

    (Al abrir tu blog, por aquí comenzaba la canción de Amos Lee "Arms Of A Woman" inevitable no poner corazón a tremenda combinación)

  3. Genín says:

    Visitando a tu mami, es el mejor poema que le podrías hacer...
    Besitos y salud

  4. Querida Pato, cada elemento de tu relato lo reconozco en mi querida mamita.
    Me has hecho sonreir y eso es una gran hazaña.
    Gracias y saludos a tu viejita de éste chileno en copenhague.
    Ian.

  5. Hermosísimo post,una prosa poética que no tiene que envidiar al mejor poema.Otra vez han brotado mis lágrimas,pero me alegra que puedas abrazarla,verla soplar las velas,gozar por anticipado el momento del encuentro.Feliz cumpleaños,señora mamá de Patojacarandá.Y que sean muchos más.Besos***

  6. ¿Qué importa si tiene forma de poema o no?. Le dijiste lo que querías decirle, igual.
    Con las madres no sé que pasa (la mía ya no está) pero es como que uno se queda siempre con algo por decirle. Será que en el fondo, en el fondo, en el fondo, uno no encuentra forma de agradecerle que nos haya dado la vida, no?
    Le deseo un felíz 80 pirulos!!!!!

  7. Malena says:

    ¡¡¡¿¿¿Estás en Pehuajó???!!!

    Espero que el oeste y la ruta 5 te traten bien, y qué lástima que las manzanillas y los tilos no te van a dar la bienvenida.

    Un beso enorme.

  8. Pues casi sin quererlo le has dicho muchas cosas... :)

    Espero que el cumpleaños fuera estupendo y que os pudierais dar unos buenos besazos.

    Un abrazote

Gracias por tus palabras