MANTENIMIENTO DE MÁSCARAS NAVIDEÑAS
Hace 17 horas.
Entre otras cosas, escribo para que no suceda lo que temo; para que lo que me hiere no sea; para alejar al Malo. Se ha dicho que el poeta es el gran terapeuta. En este sentido, el quehacer poético implicaría exorcizar, conjurar y, además, reparar. Escribir un poema es reparar la herida fundamental, la desgarradura. Porque todos estamos heridos.
Alejandra Pizarnik
Pato te quiero !!
No te olvides de mi.
A.
¡Qué preciosidad de entrada, Pato!
Bendita fiebre que nos lleva a un mundo infantil donde una estrella se convierte en patria.
Al acabar de leer yo también apagué el velador, cerré los ojos y me quedé soñando.
Gracias por tus palabras.
Besos.
Con fiebre todo se transforma.
Como si fuera magia.
Cuando eso sucede nos vamos a vivir a un cuento.
Besos.
Qué belleza, he volado junto al mercurio y desenterramos al sol en un lugar sin peros, apto solo para peritas. Un besazo.
Hola Pato, fiebre, delirio, sueños!!! Omnuilados quedamos tal vez en un éxtasis de ojos cerrados.
Un besote!!!
Hermosa entrada...Me dieron ganas de tener temperatura, para viajar entre los mundos de la fantasía...
Besos con cariño
Hola Pato: vengo del blog de Pizarr... como te mencionó como inspiradora de su post me picó el bichito de la curiosidad...
recorrí un poco tus caminos y encontré cositas que me gustaron...
Hermosas palabras encadenaste para hablar de la fiebre... cuántas imágenes sugiere.
Un beso... y ahora iré a ver de qué se trata la radio hartares.
Buen finde!
Y se quedó dormida?
A veces la fiebre permite mirar más allá, de lo bonito... besos amiga!
Que calma la de la nujer.
Un abrazo
Que calma la de la nujer.
Un abrazo