Caprichos muy despacio dichos
entre la penumbra
de un suave interior.
-Sandro-


La amaba calladito la boca.

Tal como la odiaba.

Le sucedían las dos cosas a la vez. Nunca triunfaba la una sobre la otra. Siempre iban amor y odio a la par. De la mano. Como entrañables amigos.

Amaba de ella su cuerpo. Y se lo decía con los ojos desbordados, con las manos húmedas apretadas entre sí. Con la boca cerrada y los dientes apretados. Amaba sus labios finitos que ella intentaba disimular ampliándolos con lápiz labial. Amaba sus piernas gordas que ella cubría con faldas largas estilo hindú y él espiaba cada vez que ella subía la escalera. Eso lo excitaba tanto que por momentos se olvidaba del odio, y la amaba con locura, pero enseguida le volvía el rencor. Cuando la veía bajar con algún hombre, cualquiera le daba igual, porque ella pasaba delante de él sin verlo, sin saludarlo, sin darse vuelta ante sus demenciales latidos.
Ahí la odiaba intensamente. Y se lo decía en silencio. Mordiéndose los labios. Tragando saliva amarga con palabras sucias. Maldiciéndola. Olvidando lo que estaba haciendo.

Desconcentrado.

Aturdido.

Vivía ese amor y ese odio desde hacía tanto que había perdido la cuenta.
Se sentía un ridículo en su tormento.
Agotado.

Un día tomó coraje.
Era el día de los enamorados y quiso tener un amor. Desde la mañana se sentía especialmente romántico, venía caminando por las calles y cantando Penumbras de Sandro.
Su canción favorita.

“Tu boca, sensual… peligrosa
tus manos, la dulzura son
tu aliento, fatal fuego lento
que quema mis ansias y mi corazón”

Le había comprado un corazón de chocolate envuelto en celofán plateado.
Era grande, casi como un corazón de verdad.
Era febrero y hacía calor.
Ella y sus faldas largas llegaron junto con él a la puerta de la oficina. Coincidieron en el ascensor por primera vez en la vida.
Él comenzó a temblar, sintió pánico y tocó su corazón de chocolate. Estaba blandito. Era el momento ideal.

“Dáselo” “Dáselo” “Dáselo”
Se dijo con aterrado fervor.

¡Ahora!

No supo cómo de pronto tuvo el corazón de chocolate sostenido con firmeza en la mano derecha, frente a los ojos de ella.
Ella miró el papel plateado y los ojos de ternera de él.
Acercó su mano al papel y lo desenvolvió despacito sin dejar de mirarlo, y sin dejar de mirarlo, le mordió el corazón.
Sin soltarlo, con el chocolate amarrado entre sus dientes, se lo acercó a su boca.
Lo mordió él.
Una vez y enseguida dos veces mas y ella tres mordiscos y él cuatro y ella con la boca mas grande dos bocados de golpe y él mordió su labio finito y sintió que tocaba el cielo con las manos.
Ella tocó la traba del ascensor y frente al espejo aplastó su boca de chocolate, su boca enorme y se levantó las faldas.
Él tocó con fuego en las manos sus piernas gordas, se agachó y las besó llenándolas de chocolate blando, derretido de amor escaló ese cuerpo glorioso hasta llegar a la cumbre.

Después el chocolate terminó.
Ella se acomodó las faldas, destrabó el ascensor y se perdió por uno de esos pasillos que siempre la tragaban.

Él no pudo decirle nada de su amor.

Ni siquiera cuánto la odiaba.



32 Comentarios

  1. Me encantó el relato. Amor y odio de la mano... si sabré de eso. A veces siento que no sé amar sin odiar (son muy pocos los hombres que soportan semejante paradoja).
    Un beso grande y que tengas un precioso día.

  2. BRAVO!!!!!

    Lo amé. Desde que empezo hasta el final, no podías cerrarlo de otra manera. :))))

    Besos.

  3. Strigo says:

    hola Patri, a mi me encanta el chocolate y este hermoso relato tienen un innegable sabor que casi se percibe su textura, su aroma, su gusto mezclado con besos de amor y de odio, waoo...

    te felicito sumamente exicitante el texto

  4. MBI says:

    Y la menta de su odio logro que el dulzor equilibrara su aroma ... hasta el punto de morderlo y deshacerlo lentamente... muy lentamente... sabiendo que más tarde, sería prohibido.

  5. GEORGIA says:

    Fascinante relato, me atrapó...me voy con los ojos salpicados de chocolate

    gracias

  6. Lena yau says:

    JAJAJAJAJAJAJAJA
    JAJAJAJAJAJAJAJA
    JAJAJAJAJAJAJAJA!!!

    No sabes lo que me gustan los ascensores....

    (y el chocote!)

    jajajajajajajajaja!

    que alguien me atrape que vueeeeeeeeeelo!!!!!!

    Voy como un globito curioso,

    relleno de helio,

    volando...perdida...soñando...

    JAJAJAJAJA!

    Ay, Marula...jajaja...lo que me has hecho hoy!

    Si no regreso es tu culpa....

    jajajaja

    Me encantó!

    BESOS, BESOS, BESOS!!!!!!!!!

  7. argamenon says:

    ¿Sería posible repetir algo igual, con la misma inocencia, con identica naturalidad, con toda esa intensidad y fuerza? Y si no fuera posible, ¿para qué decirle algo y estropearlo todo?
    Sublime día de los enamorados. Ese día tuvo,como le hubiera gustado, un gran amor, incluso sin palabras innecesarias.

  8. Increíble, Pato!

    Amor, odio, chocolate, erotismo desenfranado, mmmmmmmm....
    Me dio hambre!

    (por qué cuesta tanto que estas cosas pasen fuera de la literatura?

    :(

    Besos
    Voy a comprarme una cindor

  9. Patoporno!!!

    Que has comido hoy?

    Si alguna vez vienes a Barcelona subiremos a los sitios por escaleras (me lo voy a apuntar).

    :P

    Besos.

  10. Verbo... says:

    Pero Bueno !!

    Déjame bailar al son de esta música,

    Sandro... que recuerdos !!

    .... (estoy bailándolo)...literal.

    Me has hecho recordar a mi vecina, cuando ponia las canciones de Sandro y Julio Iglesias.

    En cuanto al texto, excelente !!
    solo me pregunto sobre la insistencia de las faldas largas....???

    Apuesto a que las faldas eran color plateadas, a que si !!

    Muy bueno ♥

    M.

  11. Lo breve si dulce, dos veces bueno.

    Un lobo de ascensorista

  12. Anónimo says:

    ¡Qué marcha! La combinación perfecta de elementos.

    (Y de ingredientes)

    Imposible perder el ritmo, soltarse de un guión tan perfectamente anudado.

    Los dos últimos renglones, soberbios. Final de diez.

    Enhorabuena de corazón (de chocolate)

    Un beso.
    Pepe.

  13. Anónimo says:

    Muy bueno Pato el recurso del chocolate, el ascensor, los amores y odios.

    Todo un viaje tu relato, lo he disfrutado mucho.

    Me quedé pensando en los ascensores por los que subo y bajo en mi lugar de trabajo, aunque en esos lo único que se encuentra en gente incómoda y con ansias de bajarse de una vez jajajaja.

    Me gusta más tu ascensor.

    Besos

  14. mangeles says:

    ¡¡¡ASÍ SE ESCRIBE COLEGA¡¡¡ASÍ SE COME CHOCOLATE¡¡¡Y ASÍ ES UNA CANCIÓN DE DULCE NO EMPALAGOSO¡¡

    GENIAL....


    besos ENOMES...


    (El Xavi TA SUSTAO ...en vez de TORO SALVAJE...es RATONCITO DE BIBLIOTECA...va subir escaleras para que no te lo comas ¡¡¡¡como es todo de chocolate¡¡¡ COBARDICA)

  15. ¡¡¡¡¡JAAJA JAJA JA JAJÁAAA!!!!!

    :)))Mángeles casi muero ahogada de risa :)))

  16. paolav says:

    Me haz atrapado, no puedo dejar de leerte, me sigues impresionando, que fascinante, ni un libro me había pegado tanto al suspenso de la siguiente línea. Sandro, genial en en relato, de un erotismo parecido al de las películas europeas, sin mucho adorno.

    Ah, no concuerdo con Karina, si ásan esas cosas y no cuesta tanto sólo hay que atreverse a vivir más y pensar menos.

    Un abrazo

  17. paolav says:

    Fe de errata: debió decir "pasan" y no "ásan".

  18. mia says:

    Me he enganchado hoy

    de principio a fin

    en tu relato,y

    además con chocolate!

    ♥♥♥besos♥♥♥ de mate

    amargo....

  19. PIZARR says:

    TORO... MANGELES... PATO... Um poco de seriedad por Diosssssss.

    Que son exactamente la 1:54 a.m. y acabo de soltar en pleno silencio nocturno y con mi hija dormida pared con pared, una carcajada de tal calibre que creo que la he despertado.

    Será posible... yo que a esta hora me leo las entradas sin música para no despertarla...

    Pato, ha sido genial el relato, es que he vivido ese amor odio del pobre enamorado y la glotoneria chocolatil de ambos.

    Me encanta el chocolate, la imagen del comienzo ya prometia... jajaja

    No se por que pero he recordado al Juan y la Gioia de Lena. He imaginado ambas parejas y me daba la risa. Ya ves lo que hace la noche.

    Un abrazo Pato

  20. mjromero says:

    Qué buenos, el relato y el chocolate..., claro que era un chocolate amargo y por eso el odio...,
    lo apunto aquí dentro con el capote de pollo de Juan( de Lena) echado sobre la mesa diciéndo: cómeme...
    por este orden, 1º el pollo
    2º el corazón de chocolate.
    Me río y me río...
    besos.

  21. Mmmmm... y se comieron el corazón de chocolate a mordiscos de amor...

    Me encantó tu cuento de hoy Patito hermosa. No hacía falta que él le dijera nada de su amor... A veces, convertir en sonidos los silencios del alma, no resulta nada bien...

    Muchos besitos.

  22. Uno intenta ser caballero y mira, vale, mangeles si vienes a Barcelona tu subes en ascensor, veremos quien ríe entonces doña ratoncita....

    Besos.

  23. Este relato si note avispas te lo roba Lena

    a mí me cautivaste desde que entré y escuche el susurro de mi amado Sandro!!!! (Me traje TODOSSSSSSSSS los discos de tu ciudad)
    el relato es BUENÍSIMO!!!!!

    me apetece un chocolate....
    con so, por ahora, me conformo

    beso

  24. Absolutamente encantador!!!
    y bueno, quién puede resistirse a un corazón de chocolate...hay que devorarlo!!!
    Abrazos

  25. mangeles says:

    VALE TORO YO EN ASCENSOR POR EL PIRINDOLO ESE DE COLORES QUE TENEIS EN BARNA ¿PERO CON QUIÉN?..

    PIZARR...¡¡¡TÚ TE CREES QUE LA 1 DE LA MADRUGADA ES HORA DE LEER ESTAS COSAS¡¡¡ LUEGO CLARO....A MOJAR LA CAMA¡¡¡

    besossss repartidos...

    (Patri ¡¡no te rias con la boca llena que luego dices que te ahogas por mi culpa¡¡)

  26. vulcano says:

    jajajajajajajajajajajajajajajaja.

    Entre Juan y este pobre hombre con su corazón de chocolate derretido, la escena del ascensor y la escena pornofrigrorifíca del Juan de Lena, me van a matar de risa, jajajajaja, es que se les ocurre unos finales a ti y a Lena que da para pensar en la dieta, jajajajaja.

    Y si Toro sigue invitando a Mangeles al ascensor y tu queriendo subir por escaleras mientras Pizzar intenta no despertar a nadie, tenemos mucha tinta para escribir un texto erótico- gastronómico.

    besos de fuego dorado, que viajan en caramelos tostados,

    Vulcano.

  27. mangeles says:

    JOOO VULCANO...pos unas ostritas entre que subimos y bajamos ascensores...y unas fresitas con champang...no ...mejor con cava brut nature catalán...mientra subimos y bajamos escaleras...pos no nos vendria mal...


    Juer ...acabo de acordarme de la escenita...si quieres yo te doy el mundo dice ..el ue canta juer....como quema esto...bueno eso...que me estaba acordando de la escena de NUEVE SEMANAS Y MEDIA...en la escalera...Kin Basinger y ....MIKE RUINE...o como se escribiera....ainsssss


    NO DIGO MÁS Y ME VOY A DORMIR...QUE LUEGO PIZARR...SE MEA EN LA CAMA

  28. JA JA JA JA JA JA JA
    JA JA JA JA JA JA JAAAA

    JAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!

    (¡¡¡voy a morir con vos Mángeles!!!juro que en este momento necesito un respirador artificial de las carcajadas que estoy dando, si no existieras habría que inventarte)

    Y es M Rourke, no M Ruine!!!!!!!!! ¡¡¡¡ajajjajajajj!!!

    Besos

  29. Jajaja!! qué par de locas, qué rico es reirse así

    Pati yo vine a darte las gracias por pensar en mí cuando estabas montando la música, hoy he vuelto loco a todo/a el que se ma ha acercado, en el carro, en el taller de mi hermana, y cuando no había equipo de sonido YO CANTABA!!!! y no paré de cantar
    casi me matan (acabo de llamar a mi hermana y a un amigo a los que torturé!!! para que leyeran tu comentario en mi blog!!!
    se vinieron, te leyeron y......
    además de estar encantados con la historia... ¿ADIVINA?
    me han pedido la música!!!!

    qué vivan PAto y SANDRO!!!!!

    besitos

  30. Ayyyy Patooo!!!
    Este camino de tus caminos tiene un aire seductor e intenso, un aire de visperas de ensoñación...
    tiene tu arte en todo su esplendor!!
    que bellezaaaaa!!!
    y yo aplaudo locamente y brindo... por tu grandeza:)
    te abrazo Pato...
    besos

  31. Jackie says:

    A mi de este post me gusta TODO:

    El ascensor (mmm... recuerdos, recuerdos)

    El chocolate

    Sandro (mi mamá era fan)

    El corazón blandito

    El ritmo.

    El suspenso.

    Y sobre todo EL FINAL ♥

    Genia, hiciste temblar de miedo a Torocobarde, ya estoy mirando en un libro de Barcelona que tengo todos los sitios con acensor :)

  32. Wao!
    Me ha encantado!!! ♥
    ...y sin dejar de mirarlo, le mordió el corazón... suspiro...
    Q bueno te quedó!
    bacio

Gracias por tus palabras