Doy vida a una historia propia,  cautivada por mi misma, con la fuerza que tenía cuando era chica frente al juego, con esa simpleza y las ganas interminables de conocer. Esa es mi manera de seguir jugando. Crear un pequeño universo con palabras. Un pequeño universo con hechos. El momento de la creación es oportuno para ser niños otra vez, eso pienso ahora cuando escribo. 
Niños viejos, o viejos niños, da igual. No hay edad al momento de jugar, no hay edad cuando uno crea. Una manera de que los sueños no se arruguen en un cajón, es seguir jugando, que la partida no se acabe, no al menos por ahora, no por hoy.

Estuve arrugada por un tiempo, abollada como una camisa en el fondo del canasto, hasta que me propuse jugar a ser agua y viento y cuerda y sol y tenderme con los brazos abiertos para que la vida me invada por el centro, que no me pase de costado.
Creo que dar vida a una historia propia es la manera de no hundirme en este mar virulento que es el mundo, no quiero caer como una bolsa de arena y ser parte de un montón de nada.

Tal vez igual termine siendo arena, pero mientras tanto jugué a ser mi propio sueño.

Tal vez esto sea una oración.

8 Comentarios

  1. Genín says:

    Claro, porque al final terminamos siendo lo que fuimos: polvo...
    Besos y salud

  2. No envidio nada de la gente a la que le va siempre bien, todo bien, siempre up, viento en popa; básicamente, porque no les creo la felicidad constante.

    La felicidad es un contraste, algo luminoso que se recorta contra un fondo opaco. Cuando estas bien estas bien, y cuando estas mal ... los amigos.

    Un beso, un abrazo de oso ... ¡y cosquillas!

  3. Me gusta este juego que practicamos.
    Si.
    Volvemos a la niñez y con palabras damos rienda suelta a la imaginación.
    Que privilegio verdad?

    Besos.

  4. Juega a tu scrabble mágico,vale la pena :)
    Besos***

  5. Me encantó ese tenderte en la cuerda y dejarte volar...
    Es un texto increíble, Pato. De premio.

    Que nadie nos quite la capacidad de crear... si ella estamos perdidos.

    Un abrazo enorme.

  6. Jugar...es una buenísima terapia. Es espontaneidad, es disfrutar, es libertad, es alegría, es diversión, es risa, es creatividad...Creo que el ser humano cuando más se muestra tal y como es, es jugando. En el juego salen nuestras fantasías, nuestros miedos, nuestras debilidades, nuestras alegrías...Juega, juega pato!!

  7. Hay mil y una formas de resucitar,mil y una forma de orar,mil y una formas de jugar...la tuya es única:me uno a tu juego (o a tu oración?)

  8. Darío says:

    Estuviste arrugada, no doy fe, pero cuando jugás sos maravillosa. Un abrazo.

Gracias por tus palabras