
No pienso, escucho la mañana. El sagrado silencio del aire que danza entre las hojas. Las agónicas hojas que anuncian su cambio de color un poco antes de irse.El viaje lento de las horas en el minutero de mis ojos se hamaca.Y no pienso.Siento.No sé pensar bien, me pierdo. En cambio queda tanto por sentir... Siento la aspereza de este mes que se acaba y me raspa la piel con su viruta diaria, siento